Isabel Preysler, derroche de elegancia con un look bicolor perfecto con terciopelo, flores y champán
MADRID, 5 Dic. (CHANCE) -
Llegó el día. Después de varias semanas esperando el momento ansiosos, este 5 de diciembre se estrena en Disney+ el especial 'Isabel Preysler: mi Navidad'. Un documental de dos capítulos en el que la 'reina de corazones' abre las puertas de su mansión en Puerta de Hierro para revelar cómo vive las fiestas más entrañables y familiares del año.
Un sorprendente proyecto que descubre la cara más desconocida de la socialité y en el que veremos, como no podía ser de otra manera, a Tamara Falcó o a Ana Boyer presumiendo de la maravillosa relación que tienen con su madre, aunque ha llamado la atención su ausencia en la presentación oficial del especial más esperado de los últimos tiempos.
Pero ni Isabel Presyler ni las numerosas cámaras y reporteros que han cubierto el estreno las han echado de menos, ya que la ex de Mario Vargas Llosa se ha mostrado natural, sincera, cercana y más habladora que nunca, revelando que este año pasará las fiestas en Miami con sus cinco hijos -allí residen Chabeli, Julio José y Enrique Iglesias, y Tamara y Ana viajarán con sus respectivos maridos, Íñigo Onieva y Fernando Verdasco- y que un año después de su ruptura con el Premio Nobel no piensa en volver a enamorarse.
Derrochando elegancia como en ella es habitual, la socialité ha deslumbrado con el look que ha elegido para la presentación de su proyecto más íntimo y personal, perfecto para la Navidad y sofisticado a la par que sobrio. Un traje de terciopelo negro de Michael Kors -que ya le hemos visto en alguna ocasión-, con pantalón ligeramente acampanado en el bajo, y blazer entallada con delicadas flores color champán bordadas en la parte delantera, y blusa en el mismo tono que el estampado con lazada en el cuello, de tipo fruncido.
Un estilismo de diez, cómodo y versátil a más no poder, que ha completado con su media melena -que se cortó recientemente y que le ha rejuvenecido varios años- suelta enmarcando su rostro, con un maquillaje natural como en ella suele ser habitual, y preciosos pendientes largos en oro y nácar.